Las declaraciones de Julián Calero, entrenador del Burgos CF, se han hecho virales tras la victoria por 0-2 contra la UD Las Palmas, resultado que dejó a su equipo como líder de la Segunda División. Sus palabras han abierto un interesante debate sobre qué significa realmente “jugar bien al fútbol”.

Después del partido, en la rueda de prensa, Calero abordó una crítica común hacia el estilo de juego de su equipo, considerado por algunos como poco vistoso. Sin embargo, para el entrenador, el concepto de «jugar bien» no se limita a hacer bonito con el balón.

“Voy a intentar explicarlo como lo haría a mi hijo”, comenzó diciendo, anticipando una respuesta que no dejaría indiferente a nadie. Según Calero, “jugar bonito” significa manejar bien el balón, realizar jugadas espectaculares como caños o regates, y asociarse eficazmente entre los jugadores. Sin embargo, aclaró que esto es solo una parte del fútbol.

Las cuatro fases del fútbol según Calero

El técnico detalló que el fútbol se compone de cuatro fases fundamentales: ataque, defensa, la transición tras perder el balón y la transición al recuperarlo. Según él, jugar bien implica realizar estas cuatro fases con excelencia y, además, que el equipo mantenga coherencia en cada una de ellas. «Si dominas estas fases y tienes capacidad técnica, entonces jugarás bien y bonito», afirmó.

Sin embargo, el entrenador también subrayó la importancia de no confundir ciertos momentos del juego con el concepto global de jugar bien. “Puedes estar en una fase y hacerlo bien, pero eso no significa necesariamente que estés jugando bien en general”, explicó. Para Calero, el verdadero objetivo es que su equipo desarrolle un fútbol equilibrado y efectivo en todas las facetas.

Adaptarse a las circunstancias

Calero destacó la importancia de conocer y aceptar las características propias del equipo. “Sabemos cuáles son nuestras condiciones y nos ajustamos a ellas para sacarles el máximo rendimiento”, aseguró. Según el entrenador, este enfoque no implica renunciar a jugar bien: «Eso no quiere decir que no seamos capaces de asociarnos, marcar goles, superar en el uno contra uno o aprovechar superioridades numéricas. Lo intentamos todo, pero siempre dentro de nuestras posibilidades».

El entrenador concluyó con una lección que aplica tanto al fútbol como a la vida. “Hay que ser muy listo en la vida. Sácale rendimiento a lo que tienes, no te equivoques, no intentes ser quien no eres ni hacer un personaje que no te corresponde. En el Burgos, quien llega sabe lo que hay: trabajo, esfuerzo y compromiso”, sentenció.

Con estas palabras, Julián Calero no solo defendió el estilo de juego de su equipo, sino que también ofreció una reflexión profunda sobre el significado del fútbol y la importancia de ser fiel a los propios valores.