La administración Trump ha anunciado planes para hacer que todos los beneficiarios actuales de SNAP vuelvan a solicitar sus beneficios en un esfuerzo por prevenir el fraude.
La Secretaria de Agricultura, Brooke Rollins, dijo a NewsMax el jueves que el plan es «exigir que todos vuelvan a solicitar sus beneficios, asegurarse de que todos los que reciben beneficios financiados por los contribuyentes… a través de cupones de alimentos, son literalmente vulnerables y no pueden vivir sin ellos».
El fraude de SNAP puede ocurrir cuando se envía información incorrecta, intencionalmente o no, como ingresos, tamaño de la familia o identidad incorrectos. Los errores pueden ser intencionales o, en algunos casos, surgir de errores del asistente social, datos de nómina obsoletos del empleador o confusión sobre reglas complejas. El uso indebido de los beneficios, como el intercambio de beneficios de SNAP por dinero en efectivo, también se considera fraude.
Las agencias estatales de SNAP ya exigen que los beneficiarios recertifiquen sus datos cada seis meses, y se espera que las familias informen cualquier actualización de su situación laboral, ingresos u otra información personal.
Esta es una historia en desarrollo y se actualizará.















